LUNAS
Actualmente, los fabricantes de vidrio disponen de una amplia gama de productos con
diferentes funcionalidades que se aplican a las lunas de los automóviles. Están
sujetos a condiciones sustancialmente diferentes a los vidrios convencionales,
debido a las propias exigencias que tienen asignadas como componentes de la
carrocería. Las principales características que deben poseer son las
siguientes:
§
Resistencia frente a los esfuerzos externos e
internos que se producen por motivo de los incidentes ocurridos en las
condiciones normales de circulación, factores atmosféricos y térmicos, agentes
químicos, combustión o abrasión
§
Transparencia suficiente, que permita una perfecta
visión y no provoque ninguna deformación notable de los objetos, ni confusión
alguna entre los colores utilizados en la señalización vial.
§
Una reducida transmisión térmica hacia el
interior del vehículo. La formación de un exceso de calor en el habitáculo
equivale a una disminución del confort de los pasajeros.
§
En caso de rotura, los vidrios deben poseer
características que minimicen al
máximo las lesiones de los
ocupantes y que permitan al conductor seguir viendo la carretera con suficiente
claridad.
Estas cualidades se tienen en cuenta en
el Reglamento nº 43 y en la directiva 92/22/CEE, donde se marcan las pruebas y ensayos a los que deben ser
sometidos los vidrios para poder ser instalados en los vehículos a motor.
De las funcionalidades demandadas, el
primer lugar lo ocupa la seguridad
y la protección de los
pasajeros, seguido del aumento del
confort (térmico, acústico, visual) aportado al habitáculo. Otro aspecto
que cobra importancia es el medioambiental,
que da lugar a la fabricación de vidrios
cada vez menos pesados y que
reducen el factor térmico o la energía calorífica transmitida al interior del
vehículo. Esto repercute en una disminución
del uso de la climatización y del consumo de combustible.
Estas propiedades adquiridas actualmente
por las lunas se han conseguido a través de una constante evolución y desarrollo de la tecnología de fabricación.
Fabricación del vidrio
El vidrio es un producto industrial, que se obtiene a partir de la fusión de diversas materias primas
como sílice y diferentes óxidos de sodio, potasio, calcio y metálicos. Para su
fabricación se tienen en cuenta varios elementos base:
- Vitrificables: Arena blanca de
sílice, es la sustancia formadora del vidrio.
- Fundentes: Óxido de sodio y
potasio para favorecer la formación del vidrio.
- Estabilizantes: Óxido de
calcio, estabiliza ciertas propiedades y actúa con un carácter intermedio entre
vitrificantes y fundentes.
- Componentes secundarios: Se
incorporan en proporciones minoritarias, con fines específicos. Por ejemplo,
elementos óxidos para mejorar la resistencia a los agentes atmosféricos, óxidos
metálicos para colorear, decolorantes, opacificantes, etc.
El proceso de fabricación utilizado en
el automóvil es el “Float” (flotación), y se emplea para conseguir un vidrio plano, sin defectos y sin
necesidad de pulido.
Tipos de lunas
1.
Vidrio templado
Una luna fabricada con vidrio templado
está formada por una lámina de vidrio
endurecida mediante un tratamiento térmico a 600ºC. Al enfriarse bruscamente, adquiere propiedades mecánicas
que le dan una mayor resistencia a los golpes. Presenta un característica
importante a tener en cuenta: cuando rompe, lo hace en numerosos pequeños
fragmentos que impiden la visibilidad a través de él y, además, no opone
resistencia a su penetración, de forma que los objetos causantes de su rotura
pueden entrar en el habitáculo.
Este tipo de vidrio se utilizó
inicialmente para los parabrisas y el resto de lunas de los vehículos, pero
debido a las buenas cualidades del vidrio laminado (resistencia y tipo de
rotura) su uso ha quedado restringido a las lunas laterales, traseras y techos.
2.
Vidrio laminado:
Una luna fabricada con vidrio laminado
está formada por dos láminas de vidrio
entre las cuales se inserta una lámina
plástica de polivinilbutiral (PVB). Gracias al proceso de unión, por
calor y presión, el conjunto se presenta como una única lámina de cristal. En
caso de rotura, los fragmentos
de vidrio quedan unidos a la lámina de plástico ofreciendo una mayor
resistencia a la entrada de objetos al interior, lo que aumenta la seguridad.
Se aplica a todas las lunas del vehículo.
3.
Vidrio tintado
El vidrio tintado o coloreado absorbe parte de la energía solar
(radiación infrarroja y ultravioleta), reduciendo los efectos de ésta sobre el
vehículo. El tintado disminuye el calor
que llega al interior del vehículo, manteniendo un elevado nivel de transmisión
luminosa. Su aplicabilidad es a todas las lunas (parabrisas, laterales,
posterior) y los colores habitualmente utilizados son el azul, el verde y el
gris.
4.
Vidrio tintado en oscuro
Cuando se colorea el vidrio con un tinte
más profundo, se aporta sensación de
privacidad a los pasajeros. Además, dificulta las miradas ajenas que
busquen artículos de valor en el interior del vehículo. El tintado de lunas en
oscuro está limitado por la ley,
aplicándose a los techos solares, lunas laterales traseras y luna trasera.
5.
Vidrio con control solar ajustable (electro crómico)
Permite oscurecer o iluminar el matiz del vidrio mediante tecnología electro
crómica, impidiendo el paso al interior del vehículo de un alto porcentaje de
la energía solar. Este sistema permite adaptar a voluntad del usuario la intensidad
de la luz y del calor. El color de la luna puede modificarse, permitiendo el
ingreso del 2% al 20% de la energía solar y del 4% al 40% de la luz al
habitáculo. Actualmente, esta tecnología se encuentra disponible en techos solares fabricados con vidrio
laminado, no obstante, los fabricantes trabajan para incorporarla a otras
superficies vidriadas.
6.
Vidrio anti-calor (atérmico)
Las lunas anti-calor modulan la
temperatura interior del vehículo. Ello puede obtenerse bien reflejando una
parte de la energía solar incidente y/o absorbiéndola. Las ventajas que
presenta este tipo de vidrios es una mejora
del confort térmico, reduciendo la creación de calor y la necesidad del
aire acondicionado (lo que ahorra, a su vez, combustible). Este tipo de
funcionalidad ayuda también a mantener en mejores condiciones los materiales
del interior -salpicadero, volante, tapizados, etc-, aplicándose a todas
las lunas del coche. Dentro de este grupo pueden incluirse los siguientes tipos
de vidrio:
§
Vidrio absorbente de calor. Absorbe
parte de la energía solar antes de que ingrese en el interior del habitáculo, evitando la formación de calor en el
interior.
§
Vidrio reflectante de calor. Se
incorporan al vidrio capas o revestimientos con capacidad para reflejar parte
de la energía solar incidente.
§
Vidrio tintado. Las lunas tintadas absorben parte de
la energía solar incidente.
§
Vidrio con filtro de rayos UV. A la
luna se le incorpora un revestimiento que actúa de filtro de la radiación
ultravioleta, protegiendo a las
personas y los materiales del interior del habitáculo de los rayos UV.
7.
Vidrio térmico
Se trata de vidrios calefactables, que facilitan la eliminación del hielo o escarcha
depositados sobre su superficie. Estos sistemas se conectan mediante unos
terminales al sistema eléctrico del automóvil para calentar la superficie del
vidrio, logrando desempañarlo. Son convenientes en zonas de temperaturas frías y
se aplican a todas las lunas del vehículo. Existen varios tipos de sistemas:
§
Hilos conductores en vidrio laminado. El
sistema funciona a través de unos filamentos invisibles, conductores de calor,
que se incorporan a la capa intermedia de plástico.
§
Revestimiento electro-conductor en vidrio laminado. A
través de un revestimiento metálico transparente, aplicado a una de las caras
interiores del vidrio, se aporta calor a toda la superficie.
§
Hilos de plata conductores en vidrio templado. Se
utiliza en lunetas traseras templadas. Sobre el vidrio se depositan unos hilos
de pasta de plata bastante visibles, que actúan calentando el cristal.
8.
Vidrio hidrófobo
A la luna se le incorpora un tratamiento
hidrófobo que permite una evacuación
fácil y rápida del agua, mejorando así la visibilidad del conductor bajo
condiciones lluviosas y, por lo tanto, su seguridad. El tratamiento evita la
extensión de las gotas de agua sobre la superficie de la luna; no se pegan al
cristal y mantienen una forma esférica, de forma que su evacuación está
garantizada por la corriente de aire generada por el movimiento del vehículo y
el uso del limpiaparabrisas. Se utilizan principalmente en el parabrisas, los
retrovisores exteriores y las lunas laterales delanteras.
9.
Vidrio antirreflejo
Se aplica al vidrio un revestimiento
especial antirreflejos que reduce la
reflexión de la luz sobre el parabrisas, ya que, a veces, causa malestar
e incomodidad visual al conductor.
10.
Vidrio acústico
Se fabrican lunas laminadas con una capa
intermedia de PVB especialmente diseñadas para que el conjunto ofrezca una mayor protección acústica que los
vidrios laminados estándares. Se reduce la transmisión del ruido, en particular
el sonido de baja frecuencia del motor y el sonido de alta frecuencia producido
por el viento. El resultado es una conducción
más silenciosa, que facilita la concentración del conductor. Se aplica a
todas las lunas del vehículo.
11.
Vidrio con antena integrada
El vidrio es un excelente soporte para
la integración de antenas gracias a sus propiedades
dieléctricas. Mediante serigrafía se incorporan al vidrio las diversas
antenas AM/FM, GSM, GPS, TV, etc. Este sistema mejora la estética del vehículo
al eliminarse las varillas y
evita los robos de las antenas convencionales.
12.
Vidrio con sistema display (Head-up display)
Incorpora una tecnología que permite visualizar una pantalla virtual en el
propio vidrio, en el que se muestra determinada información al automovilista (velocidad, dirección, etc). Se
introduce una capa transparente de reflexión en el vidrio; la pantalla virtual
expone un mensaje claro y breve al
conductor, sin que éste tenga que retirar su atención del camino.
Identificación del vidrio del automóvil
Los fabricantes de vehículos incorporan
diferentes tipos de vidrio en sus modelos, en función del nivel de gama.
Cuando no se dispone de la información sobre qué tipo de luna lleva incorporado
un coche, se genera un problema para su identificación, ya que la apariencia
estética de los vidrios es similar en la mayoría de los casos y resulta
complejo diferenciarlos.
Saint-Gobain Sekurit ha desarrollado un sistema
de clasificación que utiliza pictogramas para ayudar a los clientes a
reconocer fácilmente los diferentes productos de lunas para automóviles y sus
calidades distintivas. Estos símbolos han sido adoptados por varios fabricantes
de lunas y son incorporados por algunos constructores de vehículos junto al
sello obligatorio de homologación del cristal. Cuando esta acción sea más
utilizada, será más sencillo identificar el tipo de luna instalada en los
vehículos y se facilitará la labor a los técnicos de sustitución de lunas.
DESMONTAJE Y MONTAJE DE LUNA